Los hechos ocurrieron el mismo día y en la misma manzana. Delincuentes ingresaron a dos domicilios de donde se llevaron varios elementos de valor. En un gesto merecedor de reconocimiento, el padre del ladrón devolvió lo que su hijo había llevado a su casa. Pese a esto, el malviviente no fue detenido.
Delincuentes eligieron una manzana comprendida entre las calles Juan Manuel de Rosas, Independencia y Dr. Romero para robar en dos domicilios. También se dedicaron en la madrugada del viernes Santo a delinquir, mientras los propietarios de las viviendas dormían, ajenos a lo que sucedía en otros sectores de la propiedad.
En ambos casos, los malvivientes habrían saltado tapiales para acceder a los patios. En una de las viviendas, ubicada en calle Dr. Romero, violentaron la puerta de un depósito de donde sustrajeron una amoladora, un taladro, un reel y una soldadora, ascendiendo a una cifra cercana a los 800 mil pesos, según los denunciantes.
En un gesto merecedor de reconocimiento, el padre del ladrón devolvió lo que su hijo había llevado a su casa. Pese a esto, desde la fiscalía habrían considerado que no sería prueba suficiente para la detención del malviviente.
El otro suceso ocurrió en una vivienda ubicada en la intersección de las calles Juan M de Rosas e Independencia. La victima supone que fue entre las 3-4 de la madrugada del día viernes. Tras saltaron el tapial dadas las huellas de pisadas marcadas en la pared, se llevaron una garrafa color amarilla de 10 kilos, y un reel que estaban guardados en el patio de la vivienda. En este caso no se radicó denuncia