A través del programa «Que entren los que quieran», que se emite por las tardes en FM SOON, un grupo de mujeres se acercaron para dar a conocer la denuncia radicada en 2023 ante el Ministerio Público de la Acusación. Las denunciantes soy 8 mujeres que rondan los 30 años y que manifestaron ser victimas de reiterados hechos de abuso sexual por parte de un familiar cuando ellas apenas tenían entre 6 y 8 años.
Durante la entrevistas, dieron lectura a una carta que solicitaron se publique en este medio.
Somos 8 mujeres que nos une un lazo familiar, pero más allá de este lazo, nos une el dolor, la bronca, la angustia interminable…
Ya hemos realizado las denuncias correspondientes desde agosto del año 2.023 y aún no tuvimos respuestas.
En un encuentro de mates donde debimos recordar anécdotas felices de nuestra niñez, nos invadió el llanto que guardamos durante muchos años. Pues la infancia feliz, llena de inocencia que debimos haber tenido y merecido este maldito nos robó.
C.S.B. abusó sexualmente de nosotras muchos años, muchas veces.
Este malnacido transformó nuestra infancia y adolescencia en momentos que hoy siendo mujeres adultas revivimos con mucho dolor.
Él abusó de cada una de nosotras y quién sabe de cuántas o cuántos más y que por miedo o vergüenza supimos callar. Porque podemos asegurar que el sufrimiento se hace eterno y perpetuo que terminan convirtiéndose en pesadillas, malestares, inseguridades, ataques de pánico entre otros trastornos más.
Desde el mismo momento que decidimos dar a conocer nuestros casos, también se anoticiaron nuestras familias y algunos amigos; y muchas fueron sus preguntas: ¿Por qué lo callaste? ¿Por qué no confiaste en mí? ¿Por qué lo guardaste tanto tiempo?…
Aquí las respuestas: ¿Cómo podríamos expresar con palabras las atrocidades que nos hacía si apenas éramos unas niñas de 6 u 8 años?; ni siquiera podemos contarlo hoy para no revivir aquel infierno.
Fueron muchos años en la que nuestros cuerpos, nuestras mentes y corazones sufrieron demasiado. Una parte de nosotras tendrá esa herida siempre que solamente la JUSTICIA podrá al menos aliviarla.
Nos engrandece luchar por nuestras vidas, liberar a todos los niños que pasaron lo mismo y peor aún los que siguen viviéndolo ahora, o dentro de unas horas, o mañana…
Hoy seguimos viendo a este abusador caminar por las calles de Tostado, tan liberal, seguramente sus actos atroces siguen en su cabeza y en sus actos y no queremos que ningún niño u adolescente esté a su lado.
Por eso, te decimos a vos C.B.: a pesar de todas las mierdas que nos hiciste, aquí estamos más fuertes y unidas que nunca. Las niñas pequeñas no se quedan pequeñas por siempre, crecimos y nos convertimos en mujeres muy valientes (porque así nos consideramos) y que por todos los medios buscaremos justicia y así poder desenmascarar a violadores como vos. Y aunque nada ni nadie pueda borrarnos lo que nos hiciste ya no sentimos miedo y deseamos con todas nuestras fuerzas que estés donde tengas que estar.
Solo pedimos una cosa y ojalá nuestros casos no queden impunes.
Queremos justicia terrenal. No queremos justicia divina porque nuestro Dios es bueno y puede perdonarlo. Nosotras no queremos perdonarlo jamás.
¡ JUSTICIA ! Por favor, solo eso…
SI SOS VÍCTIMA O TESTIGO DE ALGÚN CASO PARECIDO AL NUESTRO, NO DUDES EN EXPRESARTE… ¡ANIMATE!, NO ESTÁS SOLA.