Alertan sobre el incremento en la venta de antibióticos sin receta y su uso indebido

La automedicación ante enfermedades que se presentan “leves”, es una tendencia que crece. Sin la prescripción médica, genera graves inconvenientes para la salud.

En las farmacias afirman que además de ser común la venta de antibióticos sin receta, el porcentaje de automedicación es cada vez más alto. Las causas del fenómeno son múltiples: van desde la falta de tiempo o dinero para ir al médico, hasta la “certeza” de saber cuál es la enfermedad que se tiene y cómo curarla sin haber asistido a un especialista.

En la explicación de los profesionales consultados, el uso indebido de los antibióticos genera una resistencia en las bacterias capaz de anular la función del medicamento en el futuro, hecho que trae aparejadas graves consecuencias para la salud.

Los antibióticos más comunes son relativamente baratos y accesibles. Incluso se pueden comprar sin receta. “Es un problema cierto, y por más que se dé asesoramiento hay quienes creen que saben mucho y desconocen los problemas a largo plazo”, dijo la encargada de una de las farmacias de una conocida cadena nacional que pidió no ser nombrada.

Cuando se da este tipo de situaciones, cuatro de cada 10 veces, las frases más comunes que se escuchan del otro lado del mostrador son: “Yo me hago cargo” o “yo me hago responsable”. La farmacéutica contó que incluso tuvo hasta denuncias en Defensa del Consumidor por no vender un antibiótico sin receta, en condiciones que consideraba no apropiado.

En otra farmacia también del centro de la ciudad, el encargado dijo: “Los piden directamente y son pocos los casos en los que el cliente solicita alguna recomendación”.

Efectos no deseados
El doctor Martín Battatauz se refirió al tema y comentó que lo más común es que una persona, ante problemas respiratorios, tome por su propia cuenta antibióticos. “Pero la mayoría de esos cuadros son virales y el medicamento actúa contra las bacterias. El efecto no va a ser el deseado”, señaló.

Pero éste no es el único problema. Tanto Bettatauz como la médica clínica Andrea Gan, también consultada, dijeron que “al tomar antibióticos de manera incorrecta, los microorganismos se vuelven resistentes”. Entonces en los cuadros en los que realmente se necesita el medicamento, éste no cumple el efecto que debe.

“En un caso de neumonía común, si el antibiótico no hace el efecto que se espera, la enfermedad se puede complicar. He visto pacientes que terminan internados o en terapia intensiva y hay que suministrarles otro tipo de antibióticos por que no se logra el resultado esperado”, dijo Battatauz.

Tomar en forma incorrecta un medicamento como el descripto hace también que disminuya la hostilidad de las bacterias, pero no las mata; la enfermedad entonces, vuelve una y otra vez. “Siempre que una enfermedad requiere un antibiótico debe ser tratada con un médico”, señaló al respecto Gan, como única solución ante la situación planteada.

Se puede complicar
Hay antibióticos que son de primera línea y más comunes. Luego de segunda línea mucho más complejos y de ahí en adelante. Cuando el médico indica un medicamento más común y no da resultado tiene que apelar a los siguientes con tratamientos que también revisten de otras características. “Hay personas sanas en las que hay que pasar a otra línea de antibióticos porque no dan resultados”, señaló más adelante Andrea Gan.

En definitiva, la automedicación nunca se recomienda. En el caso de los antibióticos, si no se toman con un tratamiento correcto cualquier enfermedad que los requiera luego puede volverse peligrosa y una situación sencilla se transforma en compleja.

Fuente: Agenciafe