La Fuerza Aérea Argentina detectó e interceptó una avioneta Cessna 206 que volaba desde Bolivia y transportaba 450 kilos de cocaína. El radar de Tostado, en Santa Fe, registró la presencia del vuelo irregular, permitiendo que dos aviones de la fuerza obligaran su descenso cerca de Rosario, donde los tripulantes abandonaron la aeronave antes de que llegara Gendarmería Nacional. Más tarde, la policía detuvo a Oscar Caba, piloto de nacionalidad boliviana y miliar de ese país. Cayó en Pueblo Andino. El ministro de Defensa, Luis Petri, describió la operación como “la más importante y exitosa contra el narcotráfico en el país”.
Un avión Cessna 206, con patente de Bolivia y cargado con 480 kilos de cocaína, descendió este miércoles en un campo cerca de la ciudad de Rosario, tras ser detectado por un radar de la Fuerza Aérea ubicado en Tostado, en la provincia de Santa Fe. Los ocupantes huyeron antes de que llegara Gendarmería, pero abandonaron la aeronave con la carga.
Horas más tarde, el presunto piloto de la avioneta fue detenido tras un llamado telefónico a la Comisaría 13ª de la localidad de Pueblo Andino, de la Unidad Regional X del departamento Iriondo, que alertó sobre la presencia de un hombre con actitud sospechosa a orillas del río Carcarañá.
La Policía llegó al lugar y constató que se trataba de una persona de nacionalidad boliviana, identificado como Oscar Caba, buscado como uno de los tripulantes de la avioneta con cargamento de material estupefaciente que aterrizó anoche en la zona rural de Aldao, en el departamento San Lorenzo.
Luego se conocería, que el piloto de 54 años es un militar de Bolivia. Le encontraron varias credenciales entre sus pertenencias.
De acuerdo a las fuentes, quien sería el único tripulante del Cessna, fue hallado en inmediaciones de la ruta nacional 34, cuando preguntaba a los habitantes del pueblo cómo hacer para llegar a la localidad de Ibarlucea. Un vendedor ambulante dio aviso a la Policía y los efectivos lo demoraron: dio una identidad falsa, agregaron.
Una de las hipótesis es que detrás del vuelo está una presunta banda narco de Rosario con mucha experiencia en este tipo de operaciones, y que tiene a sus principales cabecillas prófugos desde octubre del año pasado.
Según las tareas investigativas que llevaban adelante desde Gendarmería, la aeronave fue detectada por un radar situado en el norte de Santa Fe, cerca de la ciudad de Tostado, cabecera del departamento 9 de Julio. Con el dato, se proyectó su trayecto y se monitoreó con “cazas interceptores” que lo hicieron bajar en el sur de la provincia.
“Específicamente, a una unidad de Gendarmería que recibe información sobre tráfico aéreo irregular le llegó el dato. Se siguió y se logró encontrar la aeronave sin ocupantes. Ahí se llamó a los peritos para que puedan ir al procedimiento”, explicó un investigador a Infobae.
“Es el operativo más importante y más exitoso que registra la Argentina,en una operación compleja de la que participó la Fuerza Aérea, el Comando Conjunto Aeroespacial y la Gendarmería Nacional. Esto no tiene antecedentes en el país”, aseveró el ministro de Defensa, Luis Petri, en conferencia de prensa junto a su par en Seguridad, Patricia Bullrich,y el vocero presidencia, Manuel Adorni.
“Por eso creemos que es trascendental el cambio de rumbo que se dio a partir del 10 de diciembre pasado con instrucciones muy claras y precisas del presidente Javier Milei de dar una lucha sin cuartel contra el narcotráfico”, dijo Petri al referirse a “la colaboración” de las FFA en materia de seguridad.
El funcionario precisó que este miércoles, a las 14.46, el radar de Tostado, que recientemente inaugurado, en la provincia de Santa Fe, detectó “un eco a 40 kilómetros al noroeste de su ubicación”. Y siguió: “A las 15 horas, detecta que ese eco se trataba de una avioneta que había ingresado al espacio aéreo argentino vía Bolivia”. A partir de ese momento, “se denominó a ese tránsito aéreo como irregular, no tenía plan de vuelo y no contaba con identificación respecto a su ingreso al espacio aéreo argentino”, añadió.
Unos 30 minutos más tarde, dos aviones de la Fuerza Aérea, que salieron de Reconquista, lograron la interceptación del Cessna. El ministro indicó que fueron dos horas de seguimiento, hasta que el pequeño avión bimotor comenzó a descender a unos 50 kilómetros de Rosario.
Agentes de Gendarmería, que habían sido notificados del vuelo irregular, llegaron hasta la aeronave. No había rastros del piloto, pero hallaron panes de cocaína, con un peso de 450 kilos.
De acuerdo a datos dados a conocer por Petri, desde la implementación de cambios en los sistemas de vigilancia, el Tránsito Aéreo Irregular (TAI) bajó un 24 por ciento y se incrementó, en un 33 por ciento “la efectividad”. “Ante la interceptación, las aeronaves retornan al país de origen de donde provienen”, epxlicó.
Por su lado, el fiscal federal Claudio Kishimoto sostuvo: “Desde 2017 que estoy en Rosario y siempre se hablaba de los aviones que aterrizaban, que tiraban la droga, que había pistas de aterrizaje clandestinas, panes de drogas tirados en algún campo, pero este fue un dato más certero y eso fue lo interesante, que tan cerca de Rosario se haya detectado el aterrizaje de una avioneta como esta, que necesita unos 150 metros, no necesita una pista de aterrizaje. Llamó la atención que fuera tan cerca de Rosario”, dijo en diálogo con Radio 2.