La Ford F100, sustraída el sábado por la noche fuera de un templo evangélico, fue hallada abandonada en un camino rural, a unos 25 kilómetros al noreste de San Bernardo. El vehículo fue encontrado el domingo por la mañana, en un camino interno de un campo en zona de San Bernardo.
El propietario denunció el hecho el sábado por la noche, luego de salir del templo evangélico.
Según expuso, las llaves de la camioneta estaban debajo del asiento. Asimismo indicó que en el habitáculo tenía guardado 6000 pesos.
Hasta el momento no hay detenidos. La investigación está a cargo de la fiscal Flavia Burela de San Cristóbal.