El cuerpo fue encontrado por la Policía en un descampado. El principal sospechoso, detenido anoche, dio datos para el hallazgo.

Finalmente, tras días de una angustiosa búsqueda, fue encontrada muerta Micaela García, la joven de 21 años que estaba desaparecida desde el 1° de abril en Gualeguay, Entre Ríos.

El hallazgo fue en un descampado a dos kilómetros de la ruta 12, luego de la detención en Moreno de Sebastián Wagner, un violador serial que hoy trasladaron a Entre Ríos. El hombre habría confesado el crimen y, según fuentes de la investigación, indicó el lugar donde estaba el cuerpo.
El cadáver permanecía semienterrado entre pastizales, a unos tres kilómetros de la chacra donde ayer se habían encontrado prendas que vestía la joven en el momento de su desaparición, informaron a Télam fuentes policiales.​
En las últimas horas, los investigadores habían reducido los lugares de rastrillajes y revisaban metro a metro varias ubicaciones concretas de la ciudad entrerriana. Finalmente, los datos aportados por Wagner pusieron fin a la búsqueda.
En un impresionante operativo por aire y tierra, con helicóptero, perros rastreadores y personal de distintas fuerzas, la confesión del acusado llegó cuando recorrían palmo a palmo lugares donde aparecieron objetos que la chica llevaba en el momento de su desaparición.
Wagner fue indagado por el fiscal a cargo y llevado hasta Gualeguay para que diera más detalles sobre el paradero de la chica de 21 años. Ayer la Policía había encontrado prendas de ropa que llevaba Micaela al momento de su desaparición.
La ropa apareció en un descampado en las afueras de Gualeguay conocido como Sector 1 (o Primera Sección) de Chacras, a 400 metros de la Ruta 12. Allí encontraron una sandalia y un short animal print, prenda que llevaba la chica la última vez que fue vista, a la salida del boliche King de la ciudad entrerriana.
Personal de la Jefatura Departamental también informó que encontraron en el bolsillo del pantalón unas llaves que están peritando para corroborar que efectivamente se trate de pertenencias de la estudiante. En el momento en que se difundió el hallazgo del cuerpo, estaban haciendo rastrillajes también en el balneario Paso de Alonso y del Lavadero.
Wagner fue señalado como sospechoso de la desaparición a partir de los videos de cámaras de seguridad en los que se veía el auto del hombre en las inmediaciones del boliche. Esto, sumado a sus antecedentes por tres violaciones, lo convirtieron rápidamente en principal sospechoso. Tras varios días prófugo, lo detuvieron anoche en una casa lindera a la de su madre en Moreno. Tenía en su poder un revólver calibre 32 con el que habría intentado suicidarse sin éxito.
Fuentes del caso afirmaron que su modus operandi en casos anteriores encaja con los hallazgos recientes de ropa: «Elige mujeres jóvenes, estudiantes, las secuestra, golpea y viola y las abandona. Se desplaza en un auto con las víctimas y va tirando ropa en distintos lugares para desorientar a los investigadores».

Fuente: Clarín