Personal de la Comisaría 10ª intervino tras la denuncia de un joven de 18 años, quien manifestó haber sido agredido físicamente por dos individuos —uno de ellos menor de edad— quienes le sustrajeron su teléfono celular y se dieron a la fuga ingresando al domicilio de uno de los sindicados.
Gracias a la colaboración de la madre de uno de los involucrados, el celular fue entregado voluntariamente y quedó legalmente secuestrado.
Intervienen las fiscales Dra. Tomasso (MPA) y Dra. Vega (Juzgado de Menores), quienes dispusieron la identificación de los autores y la entrega del elemento secuestrado, conforme a lo establecido.
El procedimiento se llevó adelante aplicando los lineamientos del nuevo Régimen Penal Juvenil, destacando la actividad integrada entre la policía, el MPA y los órganos judiciales competentes, fortaleciendo el abordaje temprano de situaciones delictivas que involucran a menores.
Unidad Regional XII continúa trabajando con compromiso y articulación institucional para garantizar una respuesta eficaz frente a hechos delictivos.