“Me arrebataron la tranquilidad”

Fueron las palabras con la que una vecina de Tostado definió el momento que vivió el viernes por la tarde cuando le quitaron su billetera y celular.

Elsa relató que el viernes por la tarde, aproximadamente a las 18:00 horas, momento en el que transitaba por el paso nivel de calle Sarmiento, sufrió el arrebato de sus pertenencias.

En diálogo con el matutino periodístico manifestó que se trasladaba en bicicleta, acompañada por una menor de 5 años de edad, “fue cuando escuché que venía una moto y decían “dale, dale”, yo pensé que era alguien conocido que bromeaba porque yo iba despacio pero se adelantaron y me cruzaron la moto; eran dos chicos que me quitaron mi celular y mi billetera”.

“Me arrebataron la tranquilidad; quedamos muy asustadas; ya Tostado no es como antes ¿cómo puede ser que en plena luz del día pase esto?, sentí impotencia”, resaltó. Agregó “yo no tenía dinero en la billetera porque acostumbro a manejarme con las tarjetas de débito; lo que más lamento es el celular –un Nokia color negro con bordes plateados- porque tenía fotografías de recuerdos muy lindos que ellos seguro ya los habrán borrado”, concluyó tras decir que radicó su denuncia.

Al acecho

Conocida la historia de Elsa, otra oyente que también prefirió reservar su identidad y se presentada solo con su nombre de pila, Patricia, contó una extraña situación que vivió en el centro de la ciudad y que devela los riesgos que se corren en Tostado.

“El lunes por la noche, fui al cajero del banco provincia; cuando salimos, nos subimos con mi hija en la motocicleta y nos conducíamos despacio. Vemos que detrás venía una moto sin luz, con dos chicos de entre 17 a 20 años. Tomamos Av. San Martín por frente de la jefatura policial y sale un móvil y nosotros continuamos detrás de ese vehículo por la misma calle. Es cuando la moto dobla. Al llegar a calle Saavedra vuelven a aparecer y ya nos pusimos nerviosas, cuando acelerábamos ellos también lo hacían, lo mismo cuando bajábamos la velocidad”, detalló.

Señaló “me dio la sensación de que nos seguían, gracias a Dios no nos pasó a nada pero entendí que es necesario tener más precaución porque ya Tostado no es como antes. Cree que la mayoría cuando salimos del cajero ni nos fijamos y quería advertir que quizás de esta forma prestando atención podemos cuidarnos”, finalizó.