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Armas en las escuelas y violencias en las calles.

 

 


 

ARMAS EN LAS ESCUELAS Y VIOLENCIA EN LAS CALLES

 

José Araya: “Mi hijo no quiere ir más a la escuela por miedo”

 

Es padre del menor de 14 años de edad que fue agredido con un arma blanca el pasado viernes 11. El adolescente fue intervenido quirúrgicamente y estuvo en riesgo de muerte. Es asistido por una psicóloga porque está atemorizado. Gran preocupación en la familia porque el menor teme retomar sus actividades habituales.

 

La semana pasada se conoció el incidente en el que un menor recibió una herida de arma blanca por parte de otro menor.

Angustiado y preocupado, José Araya, padre de la víctima se acercó hasta los estudios de FM SOON para contar detalles de lo ocurrido y como viven luego de la agresión que sufrió su hijo.

“Ese día mi hijo fue a la escuela, cursa 1er. año en la Escuela Técnica. Se retiró de allí y se fue a esperar a un amigo que va a la Escuela 332; cuando estaba ahí apareció este chico –por el agresor- con otro más y lo hirió y mi hijo se desplomó; cuando un compañero vio eso, le pegó al agresor y a este se le cayó la navaja y se escapó”, relató. “Gracias a Dios a mi hijo lo auxiliaron rápido y lograron operarlo en el hospital”.

Continuó: “Nos estamos recuperando para ayudar a mi hijo. El no quiere volver a la escuela porque tiene miedo que le vuelva a pasar de nuevo esto y está mal, comenzó con la asistencia de una psicóloga por el miedo que tiene”.

“Antes de ayer cuando le dieron el alta y lo visitaron sus compañeros, le contaron que comenzaron con las clases de taller en la escuela y vimos que él se puso mal porque le gusta mucho; nos duele que él no quiera continuar por esto que le paso; mi hijo es una muy buena persona, respetuoso, cualquiera que lo conoce puede afirmar eso”.

El por qué de la agresión

Del violento episodio, Araya comentó que “el chico declaró primero que lo apuñaló porque mi hijo lo corría con una piedra y después cambió su declaración y dijo que lo confundió con otra persona”.

Precisó “supuestamente a mi hijo se lo señalaron como el Chino –primo de la víctima- con el que este chico tenía un problema por un mensaje de texto a su novia y cuando le dijeron que mi hijo era el Chino él lo encontró y lo hirió”.

“Mi hijo estuvo en riesgo de muerte por la apuñalada; en el hospital trabajaron muy bien y agradezco al equipo médico que lo acompañó como también agradezco al compañero que se metió y lo sacó al otro porque sino la navaja iba a herir más profundamente y hubiese sido otra la historia”, señaló.

Sobre el “después” de la agresión, Araya manifestó que “ningún familiar del menor que agredió a mi hijo se acercó para ver cómo estaba él, ni a disculparse. Yo fui a ver a la madre de este chico y le reclame porque por supuestos comentarios, otro de sus hijos amenazó al compañero de mi hijo, que lo defendió, diciendo que tiene una bala para el pero ella dijo otra cosa, y después la policía vino a decirme que yo fui y la amenacé; no fue así…yo quiero que se corte esto”.

Violencia instalada

En la previa del matutino periodístico, Araya contó que antes el agresor –el cual no asiste a ninguna institución educativa- había intentado herir a su hijo fuera de la escuela, situación que lo alarmó.

“Hablé con la directora de la escuela donde va mi hijo y le dije que mi hijo no pensaba volver porque tenía miedo porque incluso hay chicos que están yendo con armas a la escuela. Ella me dijo que habían tenido un caso y que ese chico había sido sacado de la escuela”, reveló. “Los padres de mi sobrino –por el “Chino”- lo sacaron de la escuela por miedo a que le pueda pasar lo mismo que a mi hijo”.

“Yo le explique al juez toda esta situación, que a mi hijo lo está tratando una psicóloga y el miedo que él tiene. Nosotros lo estamos conteniendo, están sus amigos que lo van a cuidar y yo porque a mi hijo no lo tocan nunca más”.

El caso puso en evidencia la creciente ola de violencia que se da en el interior de algunas instituciones educativas de nuestra ciudad, sobre todo en el nivel secundario, donde cada vez son más los alumnos que asisten a clases armados con cadenas y hasta armas de fuego para enfrentarse luego del cursado.

 

 


 

 

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