El fiscal a cargo del caso AMIA fue encontrado sin vida en su departamento de Puerto Madero. El cuerpo habría sido hallado en el baño. Hoy debía presentar ante el Congreso las pruebas sobre el presunto pacto oficial para exonerar a los iraníes acusados. Parte de la documentación que iba a entregar fue hallada sobre su escritorio. Desde el Gobierno hablan de un «posible suicidio». El miércoles había denunciado a la presidente Cristina Kirchner, al canciller Héctor Timerman, al diputado Andrés Larroque y al piquetero Luis D´Elía
Alberto Nisman fue hallado muerto en su departamento de la torre Le Parc, en la calle Azucena Villaflor 450, en el barrio Puerto Madero, apenas horas antes de la declaración que pensaba realizar ante el Congreso por su denuncia de un plan del Gobierno para dejar libres a los iraníes acusados por el atentado.
El cuerpo del fiscal especial del caso AMIA fue hallado en el baño de su casa. En la cabeza tendría un agujero de bala de calibre pequeño, según adelantaron a Infobae. Nisman tenía asignados para su protección a diez efectivos de la Policía Federal. Ellos informaron que el viernes lo dejaron en su casa y el sábado no salió. Recién había pedido que lo fueran a buscar este domingo. Pero cuando llegaron a recogerlo, la custodia no encontró respuesta en su departamento. Como no lograban hablar con el fiscal, llamaron a su madre, quien fue la que ingresó al departamento y halló el cuerpo, de acuerdo a lo que informó la fiscal Viviana Fein pasadas las 4 de la mañana.
Sobre el escritorio de Nisman habrían encontrado el expediente y parte de la documentación que el fiscal preparaba para presentar este mediodía ante la Comisión de Legislación Penal de la Cámara de Diputados. Fuentes policiales adelantaron a Infobae que en el departamento hallaron un arma calibre .22, una bala y una vaina. Nisman estaba autorizado por el Registro Nacional de Armas (Renar) para portar una pistola calibre .38 y otra .22, aunque por el momento se desconoce si es la misma que fue encontrada en el lugar.
De acuerdo con las primeras estimaciones, la muerte se habría producido durante la mañana del domingo. Pasadas las dos de la madrugada, desde el gobierno nacional ya se hablaba de un «posible suicidio».
El secretario de Seguridad, Sergio Berni, el jefe de la Policía Federal, Román di Santo, y la fiscal Fein estuvieron en el edificio, ubicado en Azucena Villaflor y Aime Paine; mientras Gendarmería estableció un cerco perimetral en los alrededores donde también había personal de la Unidad Criminalística Móvil, de la Unidad Médica Forense, Prefectura y Same.
Así llegó el cuerpo de Nisman a la morgue
El miércoles pasado, el fiscal había presentado ante la Justicia una denuncia contra la presidente Cristina Kirchner; el canciller Héctor Timerman; el diputado nacional y titular de La Cámpora, Andrés Larroque, y los piqueteros Luis D´Elía y Fernando Esteche.
Los funcionarios y dirigentes cercanos al Gobierno fueron acusados de idear un plan para «fabricar la inocencia» de los iraníes acusados por el atentado que dejó 85 muertos en 1994 y así obtener acuerdos comerciales que incluyeran el intercambio de granos y carne por energía.
«Es la Presidenta la que decidió absolutamente todo», había asegurado el fiscal. Según su denuncia, ella fue quien «le da la orden a Timerman de limpiar a Irán de este problema» y también fue quien «estableció que exista una diplomacia paralela para manejar estas cosas».
La voz de la jefa de Estado no aparece en las cientos de horas de escuchas telefónicas que acompañan la denuncia. Pero el fiscal no tenía ninguna duda de que la idea de buscar «la redirección de la investigación y el desprestigio de las autoridades judiciales» había sido de la propia Presidente.
Patricia Bullrich se acercó al lugar del hecho a denunciar la «gravedad institucional» del hecho
Infobae
Aunque el memorándum con Irán fue presentado con el objetivo de crear una Comisión de la Verdad para investigar el caso AMIA, el fiscal del caso consideró que en realidad se trataba de un artilugio para terminar con la llamada «pista iraní» en el caso y poner fin a las circulares rojas con el pedido de captura internacional de los acusados.
Para respaldar su denuncia, Nisman presentó a la Justicia un mensaje que el canciller iraní Ali Akbar Salehi le envió al entonces presidente de su país, Mahmud Ahmadinejad: «Argentina no está más interesada en resolver aquellos dos atentados… en cambio prefiere mejorar sus relaciones comerciales».
A cambio, Irán solicitó que la Argentina dejase caer las circulares rojas para los acusados por el atentado: el ex presidente iraní Ali Akbar Hashemi Bahramaie Rafsanjani; el ex ministro de Relaciones Exteriores, Ali Akbar Velayati; el ex ministro de Inteligencia, Ali Fallahijan; el ex jefe de la Guardia Revolucionaria, Mohsen Rezai; el ex jefe de las Fuerzas Quds y ex ministro de Defensa, Ahmad Vahidi; el ex Agregado Cultural de la Embajada de Irán en Buenos Aires, Mohsen Rabbani; el Tercer Secretario de la Embajada, Ahmad Reza Asghari, y el ex embajador de la República de Irán en nuestro país, Hadi Soleimpanpour.
FUENTE: Infobae