Liberaron a los imputados del caso Miranda

Tras la audiencia de medida judicial, el juez penal de Tostado, Dr. José Luis García Troaiano resolvió dejar en libertad a los hasta hoy detenidos, bajo el cumplimiento de ciertas normas y en tanto se continúa con el proceso judicial. Los imputados estas acusados de Homicidio en grado de Tentativa, agravado por el uso de arma de fuego. El hecho ocurrió el Villa Minetti.

A las 11.15 horas de este viernes, se llevó a cabo en Tostado la audiencia de medida judicial, la cual fue presidida por el juez de Instrucción en lo penal, Distrito Nº 15, Dr. José Luis García Troiano. De la misma, participó el fiscal del Ministerio de la Acusación, Dr. Carlos Vottero, en tanto que la Defensora Pública, Romina Cristóbal, asistió a los acusados L.A.G. y R.M.G., imputados por la agresión que sufriera Miguel Miranda, el pasado 9 de junio.

Si bien en otras oportunidades se llevaron a cabo audiencias enmarcadas en el nuevo código procesal, fue la primera vez que se presentó en tostado la evaluación de un caso de Homicidio en grado de Tentativa.

En primera instancia, el fiscal Dr. Vottero, realizó su exposición respecto a definir la coacción de los imputados en el hecho, estableciendo la responsabilidad de cada uno en el mismo.

En su relato, el fiscal describió lo que aconteció –según su investigación- el pasado 9 de junio en Barrio Guadalupe de Villa Minetti, sobre calle Urquiza –a metros del cruce con 9 de Julio-. La víctima, Miguel Miranda, se encontraba acompañado por su hermano y otro masculino cuando los imputados se hicieron presentes a bordo de una motocicleta 110 cc.. Vottero indicó que los individuos habrían disparado y sin lograr su cometido, regresaron al lugar, deteniendo la marcha del vehículo. A la altura de las circunstancias, uno de los jóvenes que acompañaba a Miranda huyó, en tanto que otro quedó a pocos metros de distancias. Con R.G. en la conducción de la motocicleta, L.G. disparó sobre la víctima, a una distancia no mayor a los 30 metros, provocándole las lesiones ya conocidas, sin tener en la línea de tiro obstáculos ni personas.

El fiscal manifestó que la intención de L.G. era quitarle la vida a la víctima, para lo cual habían efectuado un total de 3 disparos: el primero arriba mencionado, otro que impactó en una vivienda, y el tercero que finalmente hirió a Miguel Miranda.

En su descargo, Vottero se basó en el testimonio de la víctima y de los dos testigos presenciales, como también de otros dos circunstanciales. Asimismo apuntó que en las testimoniales, Miranda junto a sus compañeros, indicó que días anteriores al hecho había recibido amenazas de muerte por parte de los dos imputados.

Consumada la agresión, aunque sin alcanzar el objetivo final que era quitarle la vida a Miranda, los acusados huyeron del lugar.

Las evidencias

Notificada la policía, se realizó un allanamiento en la casa de L.G. donde se secuestró el arma utilizada en el hecho, oculta en el techo de un baño letrina de la propiedad, como también otros elementos pertenecientes a la misma, en el dormitorio del imputado.

Dentro de las evidencias, el fiscal apuntó al dermo test efectuado por personal de la policía científica, el cual arrojó resultado positivo en la mano izquierda de L.G., coincidente con el relato de la víctima.

“La finalidad del acusado era darle muerte”, remarcó Vottero, al tiempo que reforzó su hipótesis en base a la potencia del arma utilizada.

Un impacto de bala en una propiedad frente al lugar del violento episodio, es la prueba para el fiscal, del tercer disparo.

La responsabilidad de cada detenido

En base a su exposición, Vottero marcó la responsabilidad de cada uno de los imputados del hecho caratulado como Homicidio en grado de tentativa agravado por el uso de arma de fuego en curso legal con portación de arma de fuego de uso civil sin autorización.

En esto, el fiscal diferenció a los acusados, indicando que R.G. fue partícipe necesario del homicidio en grado de tentativa, agravado por el uso de arma de fuego, marcando que era quien conducía la motocicleta –la cual todavía no fue secuestrada-, observando todo el tiempo lo que hacía su compañero, dicho lo cual, apunta a L.G. como el autor del disparo, sumando  la imputación de portación de arma de fuego sin autorización.

Vottero, solicitó al juez que entiende en la causa, presión preventiva para los detenidos, bajo la presunción de peligrosidad procesal, por supuesto peligro de fuga por la magnitud de la posible futura condena –de 5 a 26 años de pena-.

La palabra de la defensa

En su carácter de defensora pública, la Dra. Romina Cristóbal, asistiendo a los imputados, se pronunció en desacuerdo con los hechos y la condena considerada por el fiscal.

Igualmente descartó las evidencias recolectadas, y señaló falta de pruebas para determinar la existencia de un tercer disparo, basándose en los dichos por la propia víctima que en sede policial dijo haber escuchado dos disparos.

Por otro lado, se basó en el certificado médico que desestima el peligro de vida en la victima, y puso a consideración del juez, la imputación del fiscal en cuanto a que la utilización del arma, ya contempla la falta de autorización para la misma. “Es innecesario agravar con portación de arma”.

En cuanto al pedido de prisión preventiva, sostuvo que no existe sospecha real sobre posible fuga, al ser sus defendidos residentes en Villa Minetti.

Al respecto, propuso una medida alternativa, y solicitó la libertad bajo custodia de los familiares presentes –madre en el caso de L.G.; tío paterno por parte de R.G.-. Agregó fijar un compromiso personal por parte de los imputados en someterse al proceso, cumpliendo por lo que su señoría contemple necesario.

Alegó además la posibilidad de prisión domiciliaria con otorgamiento de salidas para trabajar, fundamentando esto en que uno de los acusados es padre de dos niños, y el otro parte esencial en el sostenimiento económico de su familia ante la ausencia de la figura paterna.

Destacó que R.G. se presentó espontáneamente en sede policial de Villa Minetti, y que ambos imputados colaboraron en todo cuanto se les requirió.

Resolución del Juez

Luego de la exposición de las partes, el juez penal, Dr. José Luis García Troiano resolvió otorgar la libertad a los imputados, bajo cumplimiento de normas específicas: someterse a custodia de quienes comparecieron en el tribunal -familiares de los detenidos-; presentarse del 1 al 10 ante la comisaría 2da. de Villa Minetti para firmar asistencia; no  abandonar la localidad por un plazo mayor a las 72 horas sin previa autorización judicial; no  acercarse a menos de 200 metros de la víctima, Miguel Miranda, ni a ninguno de los 4 testigos. Los familiares, madre de L.G., y tío de R.G., se responsabilizaron ante el magistrado de poner en conocimiento a tribunal en caso de incumplimiento.