Los familiares de la adolescente asesinada en Villa Minetti, se movilizaron pidiendo el esclarecimiento del hecho. La fiscal indicó que aguarda la elevación a juicio, una vez finalizada las pericias. Los resultados de las pericias para arribar a un juicio. El acusado: un primo de la joven.
Con pancartas que rezaban expresiones como “Justicia por Daiana” y “Queremos al responsable. Basta de impunidad”, los padres de Daiana Altamiranda, acompañados por familiares y amigos, encabezaron el viernes último una movilización por el centro de la localidad de Villa Minetti.
Daiana era una joven de 17 años de edad, oriunda de zona de Las Gamas –provincia de Santiago del Estero-, que estudiaba en la Escuela Agrotécnica Nº 300 de la localidad del norte departamental.
El 15 de noviembre fue vista por última vez con vida en zona de la represa norte de la localidad, a pocos metros del lugar que residía, en barrio La Estrella. Lo siguiente fueron seis días angustiantes de búsqueda hasta que un mensaje de texto enviado a FM SOON fue revelador: daba la ubicación precisa en la que yacía el cadáver de la adolescente.
La autopsia estableció que la menor fue asesinada al menos por un golpe que recibió con algún elemento contundente en la cabeza. El avanzado estado de descomposición que presentaba el cuerpo complicó el análisis forense.
En principio se detuvo al novio de la joven pero un giro en la investigación ubicó, en escena a un primo de Daiana, Juan Carlos Sabán quien fue detenido el 1 de diciembre, e imputado por homicidio simple.
Para la fiscal Sonia Bustos, las pruebas recolectadas hasta el momento son contundentes: las cámaras de seguridad establecieron la camioneta EcoSport, propiedad del acusado, en el predio de la represa la noche en la que desapareció la menor. Asimismo, Bustos sumó como evidencia la conexión de la línea telefónica desde donde se envió el mensaje de texto –antes mencionado- con el imputado, al igual que con el campo en el que fue encontrado el cuerpo de Daiana.
Con un dictamen de prisión preventiva sin plazo, el Ministerio Público de la Acusación aguarda el informe de las múltiples pericias iniciadas que van desde el interior de la camioneta secuestrada, teléfono celulares, como múltiples testimoniales que faltan tomar.
Mientras tanto, la familia aguarda una condena, el tiempo determinado por la justicia para quien fuese hallado culpable del asesinato, pague por lo que hizo.