El miércoles por la tarde, nos dimos una recorrida por el B° Sur Oeste de nuestra ciudad y visitamos a la escuelita de Fútbol del Club Deportivo y Cultural 9 de Julio de nuestra ciudad. La misma hace un año y cuatro meses que funciona en la vieja cancha de once de la institución, hoy utilizada en espacios reducidos para enseñarle a los más pequeños.
Ayer, por la tarde, tuvimos la fortuna de recorrer el Barrio Sur Oeste de nuestra ciudad y conocer un poco más de la Escuelita de Fútbol del Club Deportivo y Cultural 9 de Julio, que funciona en lo que es el predio de la cancha de once, lamada en su momento «Enrique Vismara».
Hasta hace un tiempo atrás era un espacio abandonada, pero un grupo de entusiastas, con pasado en la institución y con la vocación de darle a los niños del barrio y de sectores aledaños un espacio de recreación.
Es así que hace ya un año y cuatro meses se formó la Escuelita de Fútbol del Club 9 de Julio, que supo tener su auge deportivo entre la década del 40 y los ’70, pero que nunca perdió su espíritu de club de familia, de barrio, con la humildad que lo caracterizó siempre.
Ayer, nos encontramos con Heriberto Ferrero, un trabajador como cualquiera de nosotros, pero que por las tardes en sus ratos libres tiene la importante tarea de enseñarle valores a niños y niñas del barrio, a través del fútbol.
Si bien cuando comenzaron eran apenas 5 o 7 nenes los que se acercaban a entrenar, lentamente fueron formando un grupo constante y pasaron a ser entre 20 y 30, llegando en algunas ocasiones a ser hasta cerca de 40 niños y niñas que por las tardes tostadenses, luego de sus actividades escolares, llegan hasta la cancha del barrio que luce distinta a sus días de antaño, pero que ellos con su frescura le devuelven la vida al lugar y se encargan de a poco de reacondicionarla.
Nos gratifica saber que uno de los clubes de nuestra ciudad, se mantiene en pie gracias al esfuerzo de algunas personas que buscan reflorecer viejos espacios y que sienten, que la renovación y la esperanza de una institución son los más jóvenes y les brindan el espacio necesario para que se desarrollen.