La cadena busca robar los datos de los usuarios. Qué es lo que hay que tener en cuenta para no caer en la trampa de los ladrones informáticos.

Los ladrones informáticos están a la orden del día y tratan de aprovechar cualquier circunstancia para estafar a los más desprevenidos. En este caso, se trata de una estafa que llegó a viralizarse en nuestro país en las últimas horas, y que ya había funcionado en otros países de Latinoamérica a comienzos de 2019.

Con motivo del cambio de gobierno en Argentina, comenzó a circular un mensaje de Whatsapp que promete hasta $120.000 a aquellas personas que trabajaron entre 1990 y 2019 en el Ministerio de Trabajo. Sin embargo, se trata de un fraude.

«Aquellos que trabajaron entre 1990 y 2019 tienen el derecho de retirar $120.000 de gob de Argentina. Verifique si su nombre figura en la lista de aquellos que tienen derecho a retirar estos fondos», indica el engañoso mensaje acompañado de un enlace web que obtuvo 4.000 clicks en menos de 40 segundos.

La página a la que redirecciona es un falso sitio del Ministerio de Trabajo y el único propósito que tiene es acumular los datos de las personas que lo comparten y reenvían. Otra prueba de la falsedad es que la página no cuenta con protocolos de seguridad HTTPS, además de hacerle difícil al usuario salir del sitio.

Después de completar tres preguntas, la web pide reenviar el mensaje de WhatsApp a todos nuestros contactos. Esto es lo que termina haciendo viral la estafa con la que se accede a los datos de todas las personas que participan de la encuesta apócrifa.

En diálogo con De Diez, el abogado Marcelo Temperini, quien es especialista en seguridad informática, explicó que ante la recepción de estos mensajes, es importante actuar con sentido común y notar los detalles.

«Siempre hay que tratar de chequear el sitio hacia donde se redirige. En este caso se trata de un .com, pero si fuera un sitio oficial de gobierno, debería ser .gob.ar«, detalló.

«En internet, como en la vida, nadie regala nada», concluyó Temperini a modo de reflexión.