Ocurrió en el Resto-Bar «El Bodegón», a la vuelta de la Jefatura Policial. Los delincuentes no se llevaron ni mercadería ni alimentos, se enfocaron en las bebidas alcohólicas, y en un teléfono celular. Para entrar rompieron los cristales de la puerta de ingreso, destrozaron una pared de durlock en busca de acceder a una vivienda lindera, y para salir rompieron otra puerta.

Tal vez aprovechando que el tránsito sea menor, que no se da la presencia de testigos que los delincuentes prefieren los días de lluvia también para salir a robar.

Así ocurrió esta sábado en las primeras horas de la mañana, cuando se registraba una intensa lluvia en la ciudad, delincuentes decidieron romper los vidrios de la puerta del local El Bodegón. Del interior sustrajeron una importante cantidad de bebidas alcohólicas, un teléfono celular, pero lo particular fueron los daños provocados. En su recorrida, los ladrones destrozaron una pared de durlock con intensiones quizas de acceder a una vivienda lindera. Para salir eligieron no hacerlo por la puerta que ya habian roto, sino que buscaron otra para partir.

El propietario del local, Matías Arrieta, denunció que lo sustraído estaría valuado en unos 30.000 pesos, sin contar los costos de las reparaciones.